Generadores de ozono
¿Ha notado lo limpio y fresco que huele el aire después de una tormenta? Ese agradable efecto lo reproduce el exclusivo tubo de descarga de corona que se encuentra en el corazón de nuestros dispositivos de control de olores. Convierten el oxígeno en ozono, que esteriliza el aire destruyendo las bacterias y las moléculas de olor. El ozono tiene una vida útil de unos 35 minutos y luego se vuelve a convertir automáticamente en oxígeno.
A diferencia de otros sistemas, que se limitan a enmascarar los olores, el ozono va a la raíz del problema para que no vuelvan los malos olores. Además, como el ozono es un gas, penetra incluso en los rincones más difíciles de alcanzar.
Nuestros dispositivos son portátiles, compactos y están excelentemente acabados. Un enchufe estándar de 220 V es suficiente para hacer frente a cualquier problema de olores y bacterias. Una vez encendidos, estos dispositivos proporcionan de forma autónoma una habitación inodora y estéril.